Apuntes sobre la relación entre fe y política

La fe cristiana es una especie de certidumbre, de convicción, acerca de que Dios existe y se hizo presente en la historia por medio de Jesucristo. Constituye, además, la seguridad de que toda divinidad, todo milagro, toda infinitud y todo el Evangelio de Jesús se concretan a través del amor que seamos capaces de derrochar en cada instante, en cada acto.

Un amor que, como invitó Cristo, debe fundamentarse en amar al prójimo como a uno mismo, aunque este sea su enemigo. Por otro lado, quiero precisar, el núcleo del ejercicio de tal amor ha de estar signado por la compasión, que no es más que la capacidad de ponerse en el lugar de los otros, de sentir como ellos y hasta de morir por conseguir lo que estos necesitan para realizar su dignidad. Y dicha donación, repito, hay que realizarla a favor de todas las personas, incluso de los enemigos, y en cada momento, en cada circunstancia, por difíciles que sean