¿Para qué sirve un blog? Las respuestas pueden ser tantas como seres humanos existen sobre el planeta. Estas deliciosas creaciones ciberespaciales nos permiten lanzar multiplicidad de mensajes a la Red de Redes: desde hacer pública nuestra vida privada hasta opinar sobre los más variados tópicos de la realidad. Pongo dos ejemplos esclarecedores: el arquitecto iraquí Salam Pax contó la guerra de Irak, en 2003, en su blog personal, y muchísimos medios de prensa occidentales se hicieron eco de ello; el periodista Kevin Sites, de CNN, utilizó su blog, también en la última guerra de Irak, para verter la información que no citaba en sus crónicas.