A lo largo de la historia política de Cuba es posible hallar varias organizaciones partidistas que por su carácter renovador y por la seriedad de los objetivos que se propusieron lograron captar la atención de importantes sectores de la sociedad y han quedado como referentes dentro del proceso de nuestro devenir ideológico. Somos del criterio de que al menos cinco de estas organizaciones no pueden estar ausentes en la relación de ellas que cada cual lleve a cabo: el Partido Autonomista, el Partido Revolucionario Cubano, el Partido Comunista de Cuba, el ABC y el Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxo).
Todas estas agrupaciones aportaron en su momento histórico una nueva mirada a la sociedad cubana para señalarle deformaciones profundas y buscarle vías de solución, trataron de conmover la conciencia de la ciudadanía y por el rigor de sus postulados llegaron a contar en su cúpula de dirección o entre sus miembros más sobresalientes con intelectuales de innegable prestigio, sólido espaldarazo que ya hubiesen deseado recibir otras muchas formaciones partidistas integradas mayormente por iletrados.