AÑO 2016 Año 12 Nro. 2. 2016

“Esto no es un emigrado que retorna”: sobre la representación del regreso1

por Iraida H. López

En mayo de 2015 la película Regreso a Ítaca se exhibió por primera vez en La Habana en una muestra de cine francés, después de haber sido retirada del Festival de Cine Latinoamericano en diciembre de 2014. El largometraje de Laurent Cantet, basado parcialmente en La novela de mi vida, que Leonardo Padura diera a conocer en 2002, gira alrededor del retorno de un escritor que se vio obligado a abandonar la Isla a raíz de una escaramuza.

Amadeo, el protagonista, se siente castrado en su profesión una vez que asume el destierro. Al volver de visita dieciséis años más tarde, se reúne con viejos amigos en una azotea de la ciudad a rememorar el pasado, un pasado henchido de un futuro prometedor, pero finalmente frustrado por las circunstancias históricas que condujeron al desplome del campo socialista y a la subsiguiente eliminación de los subsidios a la economía cubana. Los amigos de Amadeo, extenuados por la crisis y sus secuelas, confiesan sus ilusiones perdidas mientras que aluden a los subterfugios, no siempre pundonorosos, a los cuales recurren muchos cubanos para mantenerse a flote.